G55 greenwoodprotect,
el agente natural de extinción de incendios

G55 es un agente que se puede añadir al agua de extinción en diferentes concentraciones. (hasta 100 veces el efecto de extinción) - Ideal para la extinción de pequeños focos de fuego/nidos de fuego con un pulverizador portátil.

Una mezcla de 20 litros de G55 extingue con la misma fuerza que 2000 litros de agua (dependiendo de la proporción de la mezcla).

El G55 se utiliza sin formación previa de espuma con aire u otros gases y permanece acuoso en forma de chorro o gota hasta que entra en el frente de la llama.

G55 contiene componentes que forman una película acuosa sobre las superficies del combustible en llamas, que a su vez forma una capa de barrera entre el combustible y la llama abierta y asegura la rápida propagación del concentrado extintor. De este modo, se dificultan las reiniciaciones.

G55 El agente extintor se lanza como un chorro compacto hacia el frente de la llama y alcanza las mismas distancias de lanzamiento que el agua.

El agente extintor G55 permanece acuoso hasta que alcanza el origen de las llamas y, por tanto, también puede utilizarse eficazmente en incendios de materiales a granel y apilados, ya que puede penetrar hasta los focos de brasas.

G55 forma una mezcla con agua que está lista para su uso inmediato. No se requiere un equipo especial de espumado u otro equipo especial. Sin embargo, también pueden utilizarse.

El G55 se añade al agua de extinción en la concentración requerida mediante un dosificador.

G55 puede transportarse como solución premezclada en un depósito resistente y estanco a la presión.

El G55 fue desarrollado especialmente para combatir los líquidos ardientes.

En el caso de incendios de líquidos no polares, tras la aplicación de G55 se forma una película acuosa en la superficie del líquido, que se extiende inmediatamente, permite una extinción rápida y evita que se vuelva a encender.

La mezcla recomendada para los fuegos de clase B es del 15 %, para algunos líquidos polares, como los alcoholes en particular, la mezcla puede ser mayor.

Fuego clase A: Incendios de materiales sólidos, principalmente de naturaleza orgánica, que normalmente arden con la formación de brasas (por ejemplo, madera, papel, paja, textiles, carbón, neumáticos de automóviles). El G55 permanece líquido hasta que entra en contacto con la fuente de la llama, lo que lo hace especialmente adecuado para los incendios de materiales a granel y apilados. Cuando se utiliza el G55, el uso de agentes extintores se reduce significativamente y los incendios se extinguen de forma más rápida y segura. El resultado es un impacto medioambiental significativamente menor. Además, se reducen significativamente las reclamaciones de seguros derivadas del uso excesivo de agentes extintores. El G55 es un excelente agente extintor para la lucha contra los incendios forestales, ya que puede utilizarse tanto desde el suelo como desde el aire y tiene la capacidad de penetrar en las regiones más profundas.

Fuego clase B: Incendios de sustancias líquidas o que se vuelven líquidas (por ejemplo, gasolina, benceno, aceites, grasas, barnices, alquitrán, éter, estearina, parafina).

El G55 también es excelente para contener los incendios forestales y los fuegos de tierra.